James P. Grant (1922 - 1995), un hombre de gran dinamismo cuyo padre había sido un innovador experto en salud pública internacional en Asia, se convirtió en el tercer Director Ejecutivo del UNICEF en enero de 1980. Grant, , trabajó para la UN Relief and Rehabilitation Administration en China después de la Segunda Guerra Mundial, y posteriormente con el Organismo de Cooperación Internacional de los Estados Unidos, del que fue nombrado Subdirector en 1958.
Durante el decenio de 1960. tras trabajar por un breve período en el Departamento de Estado durante la Presidencia de John F. Kennedy, Grant prestó servicios en la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional. En 1969 se convirtió en el primer jefe del Consejo de Desarrollo de Ultramar, una organización privada con sede en Washington, D.C., en la que trabajó hasta su nombramiento como Director Ejecutivo de UNICEF, en 1980.
En 1982, Grant condujo al UNICEF en una importante campaña para combatir lo que llamó "la emergencia silenciosa mundial": las muertes de millones de niños por año debido a enfermedades fácilmente prevenibles. La "revolución en pro de la supervivencia y el desarrollo" puso en marcha iniciativas internacionales, nacionales y locales que tuvieron como objetivo salvar las vidas de los niños de los países en desarrollo mediante técnicas eficaces con relación a sus costos, como la inmunización, la terapia de rehidratación oral para prevenir la muerte por deshidratación causada por las enfermedades diarreicas, y la lactancia materna. Se ha calculado que para fines del decenio de 1980, esa revolución en pro de los niños había salvado unos 12 millones de jóvenes vidas.
Hacia finales del decenio de 1980 se conquistó otro importante objetivo. En 1989, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Convención sobre los Derechos del Niño, un tratado internacional de trascendencia histórica que en el año siguiente a su aprobación pasó a formar parte del derecho internacional.
El acontecimiento más importante de la revolución por la supervivencia y el desarrollo de los niños fue la Cumbre Mundial en favor de la Infancia de 1990, que en su momento constituyó la mayor reunión de Jefes de Estado y Gobierno de la historia.
En esa reunión, 159 gobiernos formularon conjuntamente un Declaración y un Plan de Acción en pro de los niños del mundo. Por primera vez, la comunidad mundial se fijó metas internacionales al más alto nivel con el objetivo de reducir las tasas de mortalidad y morbilidad, desnutrición y analfabetismo, y de conquistar metas específicas para el año 2000.
El paladín de los niños de todo el mundo, James P. Grant, falleció el 28 de enero de 1995. La pesadumbre es universal. Ningún ser humano en la historia hizo tanto por la salud, la protección y el desarrollo armonioso de los niños.
Por último recordar su apodo: "el americano loco", por todo lo que hizo por los niños sera siempre recordado.
Realizado por: Julián Alfonso Flores Cayuela
Bibliografia:http://www.unicef.org/spanish/about/who/index_bio_grant.htmlhttp://imbiomed.com.mx/1/1/articulos.php?method=showDetail&id_articulo=28704&id_seccion=133&id_ejemplar=2943&id_revista=20
1 comentarios:
Simplemente muy bien. NOTA: 9
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